Gestión de conflictos
En este posteo, vas a encontrar información y herramientas para abordar, y gestionar positivamente los conflictos en el ambiente laboral
Jorge "COCO" Leguizamon
1/22/20256 min read


En la vida cotidiana, los conflictos son inevitables. Ya sea por diferencias de opinión,
intereses o necesidades, los conflictos surgen en todos los ámbitos de la sociedad: en la
economía, en el fútbol, en el trabajo, e incluso en situaciones cotidianas como el tráfico o
el hogar. Aunque la palabra "conflicto" tiene una connotación negativa, en realidad, estos
enfrentamientos no son algo nuevo ni algo que debamos temer. Lo importante no es evitar
el conflicto, sino aprender a gestionarlo de manera efectiva.
¿Qué es un conflicto?
Un conflicto se puede definir como una situación en la que dos o más partes tienen
intereses, necesidades o deseos que se enfrentan entre sí. A menudo, cuando el conflicto
no se resuelve, la frustración aumenta, lo que puede llevar a acciones que no son las
mejores. En el contexto de la profesión de guardavidas, los conflictos son una realidad
constante, y es crucial saber cómo gestionarlos adecuadamente.
Los Conflictos en el Entorno Acuático
Los guardavidas, en su rol de prevención y seguridad, se encuentran en un escenario donde
los conflictos son comunes. Esto se debe, en gran parte, a que nuestra profesión se enfrenta
a un desafío cultural: hablamos de seguridad mientras la sociedad busca ocio, relajación y
diversión. A menudo, nuestra labor de prevención puede generar incomodidad entre los
turistas, quienes solo desean disfrutar de su tiempo en el agua.
Esta diferencia de enfoque puede llevar a malentendidos y, eventualmente, a conflictos.
Además, si bien nos entrenamos para manejar situaciones de emergencia como rescates,
RCP o primeros auxilios, rara vez se nos enseña cómo gestionar los conflictos de forma
efectiva. Es aquí donde entra la necesidad de una "construcción integral" del guardavidas,
que no solo implique entrenamiento físico, sino también el desarrollo de habilidades de
comunicación, empatía y gestión de conflictos.
Tres Maneras de Resolver un Conflicto
Existen tres enfoques principales para resolver un conflicto, y es importante entender que
estos enfoques no siempre están relacionados con la gestión adecuada del conflicto. Los
enfoques son los siguientes:
1. Huir
En esta opción, se elige evitar el conflicto o posponerlo para más adelante. Aunque
parece una solución sencilla, no resuelve el problema de raíz y, en muchas
ocasiones, puede hacer que el conflicto se intensifique con el tiempo. En el ámbito
de los guardavidas, esto podría ocurrir cuando decidimos ignorar un
comportamiento peligroso de un turista o evitar confrontar una situación tensa,
esperando que se resuelva por sí sola. Esto, sin embargo, puede poner en riesgo la
seguridad y generar más problemas.
2. Enfrentar
El segundo enfoque es el enfrentamiento directo. En este caso, se busca resolver el
conflicto a través de la confrontación. Sin embargo, esto puede volverse agresivo y
no necesariamente efectivo. Como guardavidas, esta opción podría implicar una
actitud hostil hacia un turista que está desobedeciendo las reglas de seguridad,
como gritarle o reaccionar de manera brusca. Si bien este enfoque puede ofrecer
una resolución inmediata, generalmente no crea un ambiente de respeto mutuo y
puede escalar la tensión.
3. Negociar
La tercera opción es la negociación, que es donde entra la gestión activa del
conflicto. Aquí, en lugar de huir o enfrentar agresivamente el conflicto, buscamos
una solución en la que ambas partes puedan salir ganando. Este enfoque es el más
efectivo y está en el corazón de la gestión de conflictos. Los guardavidas, como
profesionales de la seguridad, debemos ser capaces de negociar con los turistas,
explicando de manera clara y empática por qué ciertas conductas pueden ser
peligrosas, y buscando acuerdos que mantengan tanto la seguridad como el disfrute
del espacio acuático.
¿Cómo Gestionar los Conflictos?
Los conflictos no solo ocurren en el agua. Muchas veces, los guardavidas nos enfrentamos
a situaciones complicadas fuera del entorno acuático, ya sea con compañeros de trabajo,
turistas o incluso con nosotros mismos. Existen diferentes formas de gestionar un conflicto,
pero en el ámbito de la seguridad acuática, es fundamental mantener un enfoque de
resolución pacífica y cooperativa. Aquí te propongo un modelo de 5 pasos para abordar y
resolver conflictos de manera efectiva, y lo mejor de todo: estas iniciales forman la palabra
"ROSCA", que puedes recordar como un "elemento de rescate" para la gestión de cualquier
conflicto.
Los 5 Pasos para Gestionar Conflictos: "ROSCA"
R: Reconocer el Conflicto
Lo primero es identificar el conflicto y las partes involucradas. ¿Qué está en juego? ¿Qué
quiere cada parte? Por ejemplo, un turista quiere correr en la pileta, mientras que tú,
como guardavidas, debes velar por su seguridad. En este caso, se enfrentan dos
necesidades: la del turista, que busca divertirse, y la tuya, que busca prevenir un
accidente.
O: Observar las Opciones de Resolución
Es importante evaluar todas las posibles opciones para resolver el conflicto. ¿Cómo
puedes acercarte de manera amigable? ¿Qué recursos tienes disponibles para abordar la
situación? En este paso, la clave es tratar a todas las partes con respeto y amabilidad, sin
dejar de lado el objetivo de garantizar la seguridad.
S: Situación Reconocida a Tiempo
El tiempo y el lugar son factores cruciales en la resolución de conflictos. Abordar un
conflicto con un silbato en la boca o frente a muchas personas puede escalar la situación
innecesariamente. Reconocer la situación a tiempo, y en el momento adecuado, puede
hacer la diferencia en cómo se resuelve el conflicto. Además, asegúrate de que estás en
condiciones de intervenir: ¿es el momento adecuado para abordar el conflicto o necesitas
esperar?
C: Capturar las Intenciones de Ambas Partes
Detrás de cada conflicto, existe una necesidad positiva. El turista quiere disfrutar del agua,
mientras que tú quieres garantizar su seguridad. La clave aquí es escuchar y comprender
esas intenciones. Explicar desde nuestra formación y perspectiva puede ayudar a crear un
espacio de entendimiento. A veces, el conflicto no es solo un desacuerdo; es una
oportunidad para educar y orientar.
A: Acuerdo
El último paso es llegar a un acuerdo donde ambas partes se sientan satisfechas. El
objetivo es encontrar un “ganar-ganar”, es decir, que el turista pueda disfrutar de la pileta
de manera segura y tú puedas cumplir con tu rol de prevenir accidentes. A través de la
negociación, podemos buscar soluciones que beneficien a todos sin generar daños
colaterales.
Herramientas para la Resolución de Conflictos
Además de los 5 pasos mencionados, existen algunas herramientas clave para gestionar los
conflictos de manera efectiva:
Comunicación efectiva: Mantener una comunicación abierta, clara y respetuosa es
fundamental para resolver cualquier conflicto. La forma en que te expresas y cómo
escuchas a los demás tiene un gran impacto en el resultado.
Escucha activa: Escuchar no solo lo que se dice, sino también lo que no se dice, es
esencial para comprender las emociones y necesidades de la otra parte.
Manejo de emociones: Los conflictos suelen generar emociones intensas. Aprender
a gestionar estas emociones te ayudará a evitar que la situación se convierta en un
enfrentamiento destructivo.
Mediación: En ocasiones, contar con un mediador puede ser útil. Un tercero
imparcial puede facilitar la resolución del conflicto de manera más objetiva.
Prevención de conflictos: La mejor manera de gestionar los conflictos es evitar que
surjan. Fomentar un ambiente de respeto, cooperación y comunicación abierta
puede reducir significativamente la cantidad de conflictos.
Conclusión
La gestión de conflictos es una habilidad crucial para los guardavidas, ya que nuestro trabajo
no solo consiste en prevenir accidentes en el agua, sino también en manejar las situaciones
de tensión que pueden surgir con los turistas o compañeros de trabajo. A través de la
comunicación, la empatía y la resolución pacífica, podemos encontrar soluciones que
beneficien a todos y, lo más importante, garantizar la seguridad de todos los involucrados.
Recuerda, cada conflicto es una oportunidad para aprender y mejorar. No solo como
profesionales de la seguridad acuática, sino también como seres humanos que, a
través de la gestión efectiva de los conflictos, podemos construir un entorno más
armonioso y seguro para todos. Y cuando te enfrentes a un conflicto, recuerda la
"ROSCA" como tu herramienta de rescate para gestionar cualquier situación con
éxito.
Gestión de conflictos
Unificación de criterios
Gestión de conflictos
Jorge "coco" Leguizamon


Guardavidas
Profesor de Educación Física